Según un estudio realizado por el Peterson Institute for International Economics, la presencia de mujeres en la alta dirección provoca que las empresas obtengan un 15% más de beneficios si entre la cúpula directiva hay por lo menos 3 mujeres de cada 10 directivos.
El estudio, que ha analizado 21.980 compañías en 91 países, demuestra que el desempeño de las empresas mejora cuanta mayor es la proporción de mujeres en posiciones de liderazgo corporativo. A pesar de este estudio, la igualdad de género en los altos cargos sigue siendo un tema pendiente. El 60% de las empresas analizadas no tienen mujeres en la junta directiva.
Centrándonos en el territorio español, de las 96 empresas que participaron solo el 13% tiene alguna mujer en los puestos ejecutivos.
“Un equipo de liderazgo más diverso contribuye a que la empresa obtenga mejores resultados. España ha experimentado un gran avance en los últimos años, pero todavía tenemos mucho trabajo por hacer, ya que la presencia de la mujer en los puestos directivos de nuestras empresas sigue siendo hoy en día bastante residual”, señala Eva Abans, Socia Directora de EY en Catalunya.
Observamos que en estos nuevos tiempos se considera que el éxito empresarial y la ventaja competitiva pueden venir de la mano de una buena gestión de la diversidad del capital humano en una organización.
Tanto en España como en el resto de los países deberían tener en cuenta estos datos y fomentar ambientes inclusivos, en que ambos sexos tengan las mismas oportunidades para acceder a puestos de liderazgo. No se trata de beneficiar a la mujer, sino hacer que las reglas de juego sean las mismas para todos.
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